Como los hombres libres tenemos la necesidad de decirdirnos por algo en un determinado momento. Nuestras acciones debemos decidirnos por algo en un determinado momento. Nuestras acciones debemos decidirlas nosotros. Lo que hacemos cada día, en cambio, pueden llegar a ser costumbres que realizamos sin pensarlas, por ejemplo 'el lavarnos o el peinarnos'. Podemos elegir, pero hay veces en las que nos vemos obligados a tener que decidir sobre algo que nos ha sido impuesto.

Por ejemplo: si hay un terremoto, podemos decidir si nos quedamos en casa o nos vamos al campo, pero no si queremos el terremoto o no.

A la hora de hacer las cosas, las hacemos por varios motivos:

~ por obligación: esperando o a un castigo o una recompensa.

~ por costumbre: porque es algo que estamos habituados a hacer y ya hacemos sin pensarlo.

~ por capricho: porque es algo que nos apetece hacer.

Esta claro que la mayoría de las cosas que hacemos las hacemos o por capricho o por costumbre pero hay que tener en claro que no todo se guía por lo que nosotros queremos o no queremos hacer, también hay otras personas que quieren hacer cosas tan diferentes a las nuestras, que hasta las pueden ver mal y por ello existen las órdenes, para que nos marque la libertad y haga la vida más feliz a todos.